Papresa
“La reconversión y mejora de instalaciones es un hito estratégico para el futuro de Papresa”
Versión online o papel publicada por el medio en su página web o tirada nacional
Con más de un siglo de historia a sus espaldas, Papresa es una de las principales industrias del sector del papel prensa. Para conocer su realidad actual, hablamos con su presidente y CEO, Miguel Sánchez.
¿Cuál es la foto actual de Papresa?
Somos una compañía productora de papel con más de 125 años de historia situada en Errentería (Guipúzcoa). Actualmente somos el único productor de papel prensa del sur de Europa y la octava papelera en España –y segunda en País Vasco– dedicada al segmento newsprint. A día de hoy somos alrededor de 250 empelados en la fábrica y generamos alrededor de 150/200 empleos indirectos. A lo largo de nuestra larga trayectoria hemos ido evolucionando y mejorando en nuestros procesos, lo que nos ha hecho merecedores del reconocimiento de nuestro sector.
Y han decidido imprimir un giro a su filosofía…
Así es. Hemos iniciado una gran transformación industrial hacia un mundo digitalizado, sostenible y más verde. Después de que Quantum Capital Partners adquiriese el 100% del capital, se está cristalizando un nuevo plan estratégico basado en un modelo de economía circular, puesto que el 100% de la materia prima de Papresa es reciclada. El plan se está ejecutando a través de un potente plan de inversiones de más de 50 millones de euros para 2022 y 2023, que combina la producción de papel para embalaje y el mantenimiento de parte de la producción de papel prensa. El objetivo productivo de la compañía es llegar a 400.000 toneladas este año 2022 y en 2023 acabar en 450.000 toneladas, 150.000 de ellas para el sector de papel prensa, un 35% del total, y el resto, embalaje.
¿Por qué se ha decidido diversificar?
La transformación responde al estancamiento (o decrecimiento, en según qué áreas) del segmento newsprint con respecto al sector de papel de packaging, que crece a un ritmo del 9-10% anual. Con la pandemia y el consiguiente auge del comercio electrónico, la demanda se está disparando, lo que acelerará los buenos resultados tras la inversión.
¿Cómo se ha articulado ese cambio?
La compañía alemana Voith, uno de los líderes europeos en el sector de la ingeniería papelera, ha sido la encargada de convertir completamente la máquina PM5 de la fábrica de Errentería para adaptarla a la producción de papel de embalaje. Gracias a esas actuaciones, Papresa ha logrado aumentar su capacidad de producción de cartón ondulado para el mercado del embalaje produciendo hasta 250.000 toneladas al año de testliner y fluting, principalmente de calidades ligeras.
¿Qué otras novedades tecnológicas se han puesto en marcha?
Dentro del Plan de Inversiones de Papresa se han instalado los equipos nuevos de la nueva planta de preparación de Pastas OCC para conseguir mejores resultados en nuestros productos de papel para packaging. En esta planta tratamos cartón recuperado, que luego se convertirá en cartón para embalaje listo para ser usado por la industria y el comercio.
Por otro lado, hemos instalado un nuevo sistema de alimentación y un nuevo pulper con cortador de alambres automático. Además, los equipos de tratamiento de rechazos incluyen equipos de limpieza de esos rechazos, que nos permitirán minimizar el contenido de fibra rechazada. Gracias a estos nuevos equipos, podemos optimizar el proceso de tratamiento de materias primas y conseguimos reducir al máximo la cantidad de fibra rechazada en el proceso de preparación de la pasta.
Este proyecto de reconversión y mejora de nuestras instalaciones es un hito estratégico para el futuro de Papresa y ha sido cofinanciado por Gobierno Vasco, dentro del “Programa de Subvenciones a empresas para la realización de inversiones destinadas a la protección del Medio Ambiente”, con el título de “Nuevos equipos de la planta OCC en Papresa”.
¿Se ha tenido en cuenta también la sostenibilidad?
Absolutamente. Con la diversificación, dos de las tres máquinas de producción pasan a fabricar papel de embalaje. Este cambio supone una trasformación radical de la gestión ambiental de la empresa hacia un modelo más sostenible y respetuoso con el medio ambiente. Para ello ha sido necesario afrontar, entre otros, un gran reto: la transformación integral del sistema de tratamiento y gestión del agua.
Como se recoge en la nueva Autorización Ambiental Integrada (AAI) recientemente otorgada por el Departamento de Medio Ambiente del Gobierno Vasco, la nueva planta de tratamiento incorporará, adicionalmente a las instalaciones ya existentes, un reactor biológico anaeróbico de lecho granular (nombre comercial IC). Este reactor ha sido diseñado por la empresa holandesa Paques, líder mundial en el tratamiento de aguas de empresas de pasta y papel, y construido por la ingeniería Cadagua, que ha realizado más de 60 instalaciones de este tipo en el Estado español.
Para llegar a esta solución, hemos invertido más de dos años en realizar estudios y pruebas experimentales con las aguas residuales de las diferentes máquinas de papel. Gracias a la nueva planta de tratamiento de aguas, actualmente en construcción, se eliminará en fábrica más del 85% de la contaminación del agua, mayoritariamente materia orgánica proveniente del papel reciclado que se emplea como materia prima en la nueva producción.
Residuos, agua y energía…
El nuevo Reactor Anaerobio IC instalado en fábrica, que opera sin consumo energético, transforma la materia orgánica en gas metano que, tras un tratamiento posterior en nuestra misma depuradora, es transformado en Biogas Verde, sustitutivo del gas natural fósil actualmente consumido por la planta. De esta manera se reduce en más de un 25% nuestra huella de carbono. Esta nueva instalación nos permitirá cumplir con las Mejores Técnicas Disponibles (MTDs) del sector de pasta y papel y nos situará en el mapa europeo de sostenibilidad y generación de energías alternativas. De esta manera se asegura el futuro de la fábrica y, junto con otras inversiones en curso, nos colocará como una de las fábricas punteras en Europa en fabricación de papel embalaje.