MYSPHERA

MYSPHERA es una empresa española que busca que los profesionales sanitarios dediquen la totalidad de su tiempo de trabajo a los pacientes, liberándolos de tareas administrativas o de coordinación. “MYSPHERA nació hace diez años cuando trabajábamos en el campo de la digitalización de la sanidad, concretamente en sistemas de historia clínica electrónica”, recuerda Salvador Vera, CEO de MYSPHERA. “Entonces nos dimos cuenta de que había una gran desviación en los datos que se registraban manualmente y lo que realmente ocurría en los hospitales. A partir de ahí desarrollamos MYSPHERA, para automatizar todo lo posible y conseguir que la tecnología fuera un verdadero aliado y no una carga más de trabajo para los sanitarios”.
    

Acabar con las listas de espera quirúrgicas… ¡Creo que estaría en la carta de los Reyes de toda la población! ¿Es posible?

Las listas de espera son algo intrínseco a cualquier sistema sanitario. Lo que sí es posible es acabar con el problema de la sobredimensión de las mismas. Actualmente hay comunidades autónomas en las que se superan los seis meses de espera para una cirugía, y necesitamos normalizarlas de forma urgente.
Durante la pandemia se suspendieron más de 2 millones de cirugías en España. En el último informe del Proyecto Venturi analizaron en profundidad la actividad quirúrgica y se llegó a la conclusión de que, si continuamos al ritmo actual, tardaremos unos 20 años en llegar a las cifras de lista de espera que teníamos en 2019.
En los hospitales que hemos desplegado nuestra tecnología, el incremento de cirugías ha sido superior al 16% anual. Lo que, extrapolado al informe de Venturi, nos dice que, si todos los hospitales de España contaran con nuestra solución, la lista de espera se normalizaría en solo dos años y se reduciría a cifras récord a partir de ahí.
    

¿Cómo lo hace MYSPHERA para lograrlo?

Los profesionales sanitarios dedican mucho tiempo y esfuerzos a tareas que no tienen que ver con la atención al paciente, ya sea para mantenerse informados, para tareas administrativas, anotaciones de datos, llamadas de coordinación, peticiones, etc. Nosotros eliminamos todo eso, así que los sanitarios tienen toda la información que necesitan en tiempo real solo con echar un vistazo a pantallas colocadas en diferentes lugares o a una APP en su dispositivo móvil, y la coordinación se realiza a través de tareas automáticas.
Nuestro producto es pionero y único porque conseguimos una automatización de procesos real. Hasta ahora, los softwares de orquestación disponibles necesitan muchas entradas de datos manuales. Nosotros hemos conseguido eliminarlas localizando a los pacientes dentro del hospital, con lo que podemos medir y automatizar los procesos a su alrededor.
Asimismo, nuestra solución proporciona los datos reales de cada procedimiento hospitalario, sin el desvío temporal de la toma del dato manual que supera el 30%, y proporciona las herramientas necesarias para poder planificar mejor los recursos necesarios para optimizar los procesos
    

¿Nos podrías poner algunos ejemplos para que lo veamos más claro?

Cuando llega al hospital el paciente recibe nuestra pulsera, con la que estará localizado en todo momento. Conforme se va moviendo por el edificio se activan las acciones necesarias para hacerle avanzar por el proceso asistencial y todo el personal sabe su situación desde cualquier punto con solo mirar las pantallas.
Por eso hablamos por primera vez de automatización real. Por ejemplo, cuando tanto paciente como quirófano están preparados para la cirugía, se envía una tarea automática a los celadores para que procedan al traslado. Después de la cirugía, conforme el sistema lee que el paciente ya no está en el quirófano, se envía una tarea al equipo de limpieza para que lo preparen para el siguiente paciente.
Todo esto reduce enormemente los tiempos entre intervenciones, lo que aumenta la capacidad del hospital. Y además de todo esto, nuestro sistema recoge una gran cantidad de datos fiables y precisos con los que se puede mejorar la gestión, diagnosticando problemas o ineficiencias de forma muy sencilla.
    

¿Cómo ha sido la acogida por parte de los profesionales?

Al acometer un proyecto puede haber cierta resistencia al cambio, pero la percepción cambia pronto, cuando se dan cuenta de que venimos a facilitar su trabajo. Los sanitarios quieren dedicar su tiempo a su vocación, que es la atención al paciente, y es lo que nosotros les traemos.
También mejoramos la conciliación para todos. Se respetan mucho mejor los horarios porque se planifica con mayor precisión. Esto es importantísimo en un sector con tantas exigencias y presiones, porque el estrés también se reduce en su entorno de trabajo, que también se vuelve más silencioso. Las llamadas constantes y órdenes a viva voz son frustrantes, y con nosotros se reducen al mínimo.
    

Ahora habéis lanzado la aplicación para urgencias, ¿qué tiene de distinto?

La base tecnológica es la misma, pero el contexto es muy diferente. El proceso quirúrgico es más cerrado y ordenado, en cambio el de urgencias es mucho más caótico e impredecible por su propia naturaleza. Esto ha sido todo un reto de cara a automatizar los procesos, y tenemos que agradecer el trabajo del personal del Complejo Hospitalario de Navarra y del Hospital 12 de octubre de Madrid que nos ha ayudado mucho a adaptar la tecnología para satisfacer sus necesidades.
Ahora tenemos un producto consolidado también para las urgencias, con una gran cantidad de pantallas de información diferentes para coordinar el triaje, las pruebas o las consultas. También mantenemos la gestión de áreas para mejorar la eficiencia. Estamos muy contentos con esta nueva solución y deseando desplegarla en otros hospitales.
    

Y el proyecto también interesa a la Unión Europea, ¿verdad? Por otro lado, ¿se están utilizando bien los Fondos Next Generation?

Así es. La UE acaba de entrar como inversora de MYSPHERA a través de su fondo EIC, apostando por nuestras soluciones para solventar grandes problemas de nuestros sistemas sanitarios públicos, como son las listas de espera. Estamos muy contentos por su apoyo y el del resto de inversores. Es un hito muy importante para nosotros.
En cuanto a los fondos Next Gen, son una oportunidad única que tenemos que aprovechar para transformar y mejorar nuestro sistema sanitario. Usarlos para comprar equipamiento e infraestructura es muy sencillo desde el punto de vista administrativo, pero no tiene el valor transformador que podemos ofrecer las compañías que trabajamos para llevar a nuestro sistema sanitario a otro nivel y realmente atacar los grandes problemas de ineficiencia como actualmente permite la tecnología. Solo espero que en el futuro podamos echar la vista atrás a esta oportunidad y estemos orgullosos de cómo la usamos para mejorar y avanzar hacia el futuro.