La Casa de Hormigón

El sistema CV+H de La Casa de Hormigón, en colaboración con Termoklinker de Cerámicas La Paloma, permite construir fachadas de paneles de hormigón con exterior de ladrillo visto, aptas para la construcción de edificios de viviendas en altura. Una solución a la crisis de la vivienda rápida y efectiva, a la vez que energéticamente eficiente.

En un país en el que, según el Banco de España, faltan alrededor de 600.000 viviendas y no hay suficiente mano de obra para construirlas, la innovación en la construcción se ha convertido en una urgente necesidad. Especialmente si tenemos en cuenta que la construcción tradicional requiere entre tres y cinco años para finalizar un edificio de viviendas y que la demanda real de espacios habitables está muy por encima de la oferta disponible en el mercado.

La construcción modular industrializada, que reduce los plazos de construcción a un período máximo de 5 a 7 meses, se ha aplicado tradicionalmente a la edificación de viviendas unifamiliares, pero ahora es posible aplicar esta tecnología a la construcción de edificios de varias plantas, agilizar el proceso de edificación y acortar los plazos de entrega.

Un sistema innovador

La revolución viene de la mano de La Casa de Hormigón, cuyo innovador sistema CV+H, en colaboración con Termoklinker de Cerámicas La Paloma, permite construir edificios de viviendas en altura con fachadas de paneles de hormigón armado y exterior de ladrillo visto, en un plazo inferior en 2/3 al tiempo medio de una construcción tradicional, esto supone una respuesta rápida y efectiva al acuciante problema de la falta de viviendas en nuestro país. Es interesante destacar que, al tratarse de paneles ensamblables, no es necesario instalar andamios de fachada, lo que contribuye a reducir aún más los costes y los tiempos de construcción. 

Con este sistema, La Casa de Hormigón se convierte en una pieza clave del sector de la construcción industrializada, ya que se sitúa en una posición privilegiada para hacer realidad los objetivos del Proyecto Estratégico para la Recuperación y Transformación Económica (PERTE), que ha puesto en marcha el Gobierno y que busca dar una solución real a la escasez de viviendas en España, promoviendo un importante impulso a la construcción modular industrializada.

El impulso del PERTE, un nuevo horizonte para la construcción modular

El PERTE no solo conlleva una fuerte inversión inicial en la construcción modular, también demuestra una clara voluntad política de promover la innovación en el sector. En este sentido, La Casa de Hormigón y su revolucionario sistema CV+H con Termoklinker se convierten en el aliado estratégico del Gobierno para solucionar la crisis habitacional y avanzar hacia un modelo urbanístico más eficiente y sostenible.

Los paneles de hormigón con exterior de ladrillo visto de La Casa de Hormigón se construyen a demanda, en un entorno controlado y con sistemas automatizados que reducen al mínimo los fallos y evitan la acumulación de residuos, disminuyendo drásticamente los costes de almacenaje. Además, al tratarse de construcción en seco, se reduce el consumo de agua, un recurso imprescindible para la vida y cada vez más escaso. “La industrialización de la construcción no solo se perfila como una solución clara a la falta de viviendas, sino también como un paso adelante hacia una arquitectura más comprometida con el entorno y más cuidadosa con el medio ambiente”, señala José Manuel Ruiz, CEO de La Casa de Hormigón. 

Hogares eficientes y con estilo

En las viviendas edificadas con el sistema CV+H con Termoklinker de La Casa de Hormigón se conjugan la solidez y la resistencia del hormigón armado con la estética clásica del ladrillo visto, permitiendo que la construcción modular no solo sea rápida, sino también atractiva y duradera.

No obstante, la gran ventaja de este método radica en su doble aislamiento térmico y acústico que responde a las exigencias actuales en cuanto a aislamiento y sostenibilidad. Gracias a su doble capa aislante, estas viviendas ofrecen un confort térmico y acústico superior, creando espacios más tranquilos y eficientes energéticamente, ya que estas viviendas pueden mantener una temperatura estable todo el año, reduciendo el gasto en calefacción y aire acondicionado.

“La innovación en la construcción debe ir de la mano con la calidad de vida de quienes habitan las viviendas. No basta con construir deprisa, hay que hacerlo bien, pensando en el bienestar a largo plazo de los futuros usuarios de las viviendas. Con nuestro sistema, no solo aceleramos los tiempos de edificación, sino que garantizamos hogares confortables, eficientes y sostenibles, afirma José Manuel Ruiz, CEO de La Casa de Hormigón.”

En definitiva, el sector inmobiliario camina, de la mano de la construcción industrializada, hacia un horizonte prometedor con tiempos de entrega mucho más cortos, altos estándares de calidad y una clara apuesta por la eficiencia energética.